Este año mi hija, Mairena, ha empezado a dar clases de guitarra eléctrica y me dijo que le gustaba mucho el modelo Fender Stratocaster. Para su cumpleaños he decidido hacerle una a tamaño real. Este proyecto ha resultado un auténtico reto. Después de ver unas cuantas fotos por internet, me puse manos a la obra; tenía claro que el mástil no quería hacerlo de bizcocho, porque le quita toda la apariencia real a la guitarra. Después de darle algunas vueltas a la cabeza, decidí hacer el mástil de rkt, que son las iniciales de Rice krispies trecil, el bizcocho es genovés y el relleno un buttercream de merengue suizo con crema de mango, buenísimo. Toda la tarta es comestible, a excepción de las cuerdas. El resultado ha sido satisfactorio para mí y a ella le ha encantado su primera guitarra eléctrica; la siguiente creo que no será comestible.
